domingo, 23 de marzo de 2025

automàtico soneto nùmero 2023

 se trata de una cebolla cristalina cuyo objetivo es evidentemente

no otro que hacerme llorar a mares, a chorros; la otra noche, hice el
amor con la dicha cebolla y largaba làgrimas de esperma y sangre, o
sea semillas, o sea remolacha y familias y amor y èxitos tumultuosos y

varios; la dicha cebolla terminò siendo mi señora esposa y tuvimos unos
cuantos hijos llamados cebollitas que se dedican a patear la pelota en grandes
canchas de bochas o foot ball, patean cabezas de enemigos atàvicamente, corta
zarianamente, creo, o son pateados de vez en cuando en el trasero, por pelotudos,

justamente; por las noches, hacemos el amor con mi señora cebolla mientras los
cebollitas duermen: se acuestan temprano para ir ìdem a la escuela donde aprenden
grandes lecciones de crìmenes, asesinatos varios agravados o atenuados, adulterios,

incestos que no configuran delito porque son cuestiones de orden netamente privado, si
hay consentimiento o son mayores no hay ningùn problema, no es pecado ni pescado ni
nada que se le parezca, amo a mi cebolla y a mis cebollitas, amo a mi ama, de casa y llaves.

Soneto automàtico nùmero 102

 como en un paisaje desolado de àcida lluvia, o estomacal acidez,

como en un àmbito onìrico y fantasmal, como devenido apocalìptico o
antediluviano, como si se tratara de una de esas pelìculas en negro y blanco,
que solìan pasar en los cines de barrio mientras las parejas se abrazaban y besaban

como en espacios que se derriten o son socavados o minados agujereados como un queso
perforados como paredes en las que hay que meter un tarugo y luego atornillar o enloquecer
en esos lugares descascarados y cuyos objetos se pudren lentamente como cuando algunos
suelen afirmar en forma absolutamente irresponsable: "hay que pudrirla toda"

en esas necròpolis o sementerios poblados por millones de cadàveres agusanados
y a los cuales acuden raudamente legistas mèdicos y batallones de microbios voladores
con monumentos mausoleos ecuestres estatuas bustos Gardel y Lepera, Antonio Gasalla

esos calientes paisajes que se caen a pedazos y las mujeres juntan esos añicos con
grandes cucharas plateadas y grandes cacerolas abolladas e incluso hacen el amor
entre las tumbas durante las noches los muertos se aman en grandes orgìas sonàmbulas

poesia taller caballito 2025 domingos 49034485

 Material en el sentido de concreto, no abstracto

como ciertos poemas que detesto franca y cordialmente
por lo abstracto que son: del tiempo de la militar dictadura
poemas metafìsicos, sentimentales, en fin: abstractos.

En ese sentido, prefiero el materialismo nerudiano
incluso en los 100 sonetos amorosos, el tipo permanece atado a lo
material, Dialèctica hegelo marxista mediante, PC mediante,
pero siempre està lo matèrico, las cosas hechas por el hombre o la mujer.

Ni hablar en las elementales odas que como odaliscas van
desenroscando lo matèrico material, lo corpòreo corporal; parecerìa
que Neruda destestaba las frìas abstracciones, las entelequias, desde el

comienzo de su obra de obrero poemàtico se ve eso, se siente eso: la
presencia de las sustancias, de los elementos, los cotidianos objetos, la
cotidiana como ahora se estila o acostumbra decir, lo, en definitiva, concreto.

profesor particular literatura y baile tango Caballito 49034485

 Todo ha terminado acaso para siempre:

la muerte me espera a la vuelta de la esquina
tengo toda la muerte x delante y x detràs.

Esto no es todo, x ahora: la maldita vejez y sus achaques
las minas increiblemente hermosas que no te llevan el apunte
no te dan ni 5 de bolilla, pelota
en fin, no me prestan
ni 2 segundos de su amable y distinguible atenciòn
mientras observan o hablan por su telèfono celular, miran
toda clase de efìmeros videitos que se repiten una y 1000 veces
o en su defecto escuchan la bazofia musical
que tambièn repite un ritmo alienante y enloquecedor
supuestamente alegre y popular llàmese cumbia reggaeton cuarteto
y sus variantes màs o menos ligeras
que desconozco totalmente

la vejez y sus malditos o fucking achaques, enfermedades varias:
dolor de cintura o de estòmago, ayunar, comer poco y bien, en lo posible
no masturbarse por las noches o durante la siesta de forma plenamente compulsiva
orinar dentro del tarro (sentarse si es posible para no pifiarle)
las minas ni se mosquean, ni hablar de eyacularles piropos (eso està prohibido, se
considera callejero acoso, un gènero ciertamente en vìas de extinciòn el antiguo piropo)

ni bien me ven, de inmediato miran para otro lado o hacia el piso,
dan vuelta la cara en un evidente corte de rostro o incluso
en el peor de los casos
ponen cara de asco, de
repulsiòn.

Estos son los avatares y desventuras
del verde viejo.

Entonces, me pongo a recordar los viejos tiempos
los buenos viejos tiempos
en que levantaba minas a diestra y siniestra
en los bailes, las milongas
no dejaba tìtere con cabeza
volteaba muñecas que daba miedo
tenìa ergo quilombos varios
con minas y tipos
que me increpaban por las calles
o simplemente me querìan trompear

Tiempos aquellos!

Bailaba tango y otros ritmos como rock
pero especialmente el tango
durante noches enteras
durante dìas enteros
desde la mañana hasta altas horas de la noche
hasta que las velas no ardìan
o hasta que se me quemaban las pestañas
incluso me pasaba de ir con una hermosa al hotel màs cercano
y luego de un par de horas
volver a la milonga

el sexo es infinito
y la juventud tiene una potencia sin igual
arrolladora

y bailaba durante dìas enteros
sobre todo durante las vacaciones de verano
por el solo gusto de hacerlo
o a veces a cambio de unos mangos, monedas, billetes

exhibiciones de baile, clases grupales y privadas, shows (show time!)
exhibiciones en fiestas de casamiento o en aniversarios
o en cumpleaños de 15

viajes en trenes, en colectivo, en subte, en taxis o en remise

copetines, brebajes, copas, tragos varios

en salones llenos de humo de cigarrillo

y luego a dormir en alguna parte
para descansar de esa vida bohemia y nòmade


hoy recuerdo aquellos tiempos en que era feliz sin saberlo
y mi juventud se desenroscaba y destejìa
en sagaces movimientos
inquietantes pasos
doradas figuras
borroneadas por el tiempo

sentado en el balcòn recuerdo aquellos tiempos
en que esto mismo solo era una letra de tango

taller poesia erotica Caballito domingos

 Relaciones absolutamente ambivalentes (al decir de Freud, Sigmund) eran las que

tenìa con la famosa Liliana Judith Q. (por razones obviamente evidentes
y para evitar, dentro de lo posible, probables procesos legales, penales)

Ardientemente me atraìa su atractiva figura
pero su manera de ser (moral, èticamente hablando) me parecìa francamente
detestable, no soportaba
verla comer sola, deglutir ruidosamente, sorber y absorber a grandes y estruendosos
sorbos
toda clase de bebidas, brebajes, alcohòlicos o no.

Y como condiciòn ineludible para la concurrencia al hotel màs cercano
a los efectos de hacernos mutuamente el amor, sorbernos y absorbernos, chuparnos
recìprocamente etc. parecìa poner, oponer, como requisito previo e infalible
la concurrencia a la parrilla màs cercana (sita en en Avenida Diaz Velez y Acoyte, de esta
(y este) Capital, para màs datos,
donde procedìa a cortar y masticar en lenta càmara, grandes trozos
de carne, llena de esos condimentos que suelen aderezar en estos gastronòmicos
sitios. Luego,

con todos estos sabrosos aromas en su boca esplèndida
(a què negarlo: era una bocota para comerla toda a besos, roja y perfecta, modèlica)
nos dirigìamos caminando al hotel màs cercano
sito en un pasaje a la vuelta y casi enfrente de una estaciòn de servicio
con su olor a nafta, aguarràs etc.

Allì hacìamos el amor.

Su cuerpo era opulento y magnànimo
de grandes pechos llenos de sabrosa leche materna
que ansiosamente esperan ser chupados y succionados a màs no poder
hasta el final: era una lady de
grandes gemidos que llenaban todo el espacio del hotel
y no exagero, no es hipèrbole: estoy seguro que se
podìan escuchar
a varias cuadras a la redonda
en medio de la noche y su silencio de sàbado.

Recuerdo exactamente como me gustaba chupar aquella boca roja y perfecta
aquellos senos grandes y puntiagudos
aquellos vaginales labios
aquellos clìtoris
aquella vulva
lejana en el tiempo
y que me genera una total nostalgia

en efecto, extraño aquella extraña mujer que me generaba
ambivalencias y ambigüedades varias
dignas de Catulo
Horacio
Freud
et toutes les autres
sin ir màs lejos ni cerca.

Despuès a dormir a su casa
ubicada al fondo de una inmobiliaria de Caballito
en la que procuraba ella vender o alquilar
toda clase de propiedades
durante la semana
y en la cual a veces cenàbamos allì
suculentas empanadas de carne, pollo, jamòn y queso etc.
que dejaban el ambiente impregnado de acres
aromas
y luego dormìamos en los grandes colchones
o en la habitaciòn o cuartito del fondo
repleto de toda clase de libros de poemas
primeras ediciones incluso
o acerca de otros temas como reiki, marxismo, acupuntura, programaciòn
neurolingüìstica, counseling, psicologìa genètica y
similares.

poesia erotica buenos aires capital taller

 Por aquel entonces, el amor adoptaba formas decididamente lascivas

que paso a tallar con todo detalle: òsculos memorables de toda laya y prez;
se plasmaba
en ardientes besos grandemente salivales: todo eso fluìa en forma de viscosos
fluidos de toda especie, gelatinosos, entre otras formas:
abrazos, grandes abrazos mutuos y nuevamente ardientes
(como si no existieran, acaso, otros adjetivos)
mordiscos incluso
incluso amorosos cachetazos depravados
y grandes y largos juegos sinuosos y absolutamente perversos
bàsicamente lujuriosos
llenos de fuego,
fuego y menstrual sangre lunar, lunàtica.

Esos amorosos lìquidos extraidos del cuerpo
con sus penetrantes aromas
entremezclados con perfumes y almizcles ciertamente baudelarianos
me importaban un bledo
3 carajos
un ràbano
un pepino

por el contrario,

esos olores corporales me volvìan loco de dicha, loco
de remate, al punto tal que

se plasmaba, por otra parte, en formas tentaculares
como si se tratara del monstruo de Victor Hugo
en los Trabajadores del Mar
el cèlebre alegremente Kraken
el azul unicornio que en cartas dirigidas a la familia
tanto ansiaba Manucho para su novela homònima

ese unicornio estaba parado en el gran comedor familiar
frente al Rìo de la Plata y al Hipòdromo de Palermo
esa carta estaba aplastada por un vidrio
pero se leìa perfectamente, sin ninguna clase de
inconveniente.

Y esto no era todo, decididamente: ademàs,
eran como grandes falos propuestos a la mirada del pùblico
lector. Pero no nos vayamos por las ramas y volvamos al centro de
nuestro poema: como iba diciendo, el amor adquirìa las siguientes formas
màs o menos vagamente siniestras, o no (todo da lo mismo, todo vale)
pero totalmente legìtimas: juegos

àvidamente sadomasoquistas y plenamente perversos (de mutuo acuerdo, eso sì)
consistentes en amordazar, vendar ojos, encintar con cinta adhesiva a la cama o
alrededor de una camilla, como una suerte de egipcia momia cinematogràfica, digamos

jolibudense. Cinturones, fetichismo abstracto, stilletos, botas bucaneras de grandes altos
tacos (para ser clavados en la pantalla del televisor o la computadora) largos guantes negros
(dedos cerrados) de lycra o terciopelo o en su defecto, rojos, rojos
a màs no poder, como una llama, una llamarada sangrienta, màs o menos cruel, crudelìsima.

Y luego el agotamiento total, quedarnos dormidos como 2 tortolitos,
desnudos y abrazados, en medio de la noche.
en medio de las sàbanas,
en medio de la habitaciòn deshabitada
de blancas paredes descascaradas
y repletas de grafittis.

Bajo los grandes espejos enmohecidos que reflejaban
aquella desnudez, aquel abrazo.

Y dejarse llevar por la Palabra
o mirar por la ventana el Palacio de los Juegos, justo enfrente
o mirar aburridos pornogràficos videos
tan aburridores y monòtonos
como el Marquès de Sade.

Cuantas desnudas parejas pasaron por aquellas hoteleras habitaciones,
aquellos cuartos desconchados
aquella piezas lujuriosas y violentas
llenas de gemidos y abismos varios
llenas de aullidos e imàgenes eròticas
bellamente obscenas
como si se tratara de una teatral escena
como un recòndito escenario nocturno.

Ahora, yo creo que este poema no da para màs
y por eso lo dejo aquì
porque ademàs en algùn momento hay que parar
dejar de escribir

escribir cansa

Pavese mediante

taller poesia sabados domingos 2025

 es extraño pero con ella no recuerdo el amor en la cama

sino ciertos paseos por arbolados barrios residenciales
en las tardes del domingo porteñero y letal

largas caminatas tomados de la mano por grandes avenidas
durante las noches, mientras ardientemente nos besàbamos en la boca
y cerràbamos los ojos o nos miràbamos loca o tenuemente hipnotizados

o los grandes recitales de poesìa los viernes o los sàbados por la noche
mientras otra vez nos besàbamos ardientemente para bronca de los otros
se nos hacìa agua la boca, compartìamos nuestras salivales glàndulas
y todo aquello que, de pronto, emergìa de nuestros mutuales cuerpos

esto no fue todo: los coitos compartidos en los sòrdidos y lùgubres hoteles
las cenas en los bodegones màs infectos y guturales
o en las parrillas màs concurridas de Urquiza o Villa Pueyrredòn, por ahì cerca
los abrazos en los bailes repletos de bailarines como una manifestaciòn o Cannas

taller poesia 2025 Caballito 49034485

 Vengo del recuerdo y al recuerdo voy

como quien vuelve del pasado
es una bruma vaga la memoria

se compone de mujeres, ànforas sagaces, ciertos escombros
y mucho màs, o no mucho màs, ni menos: algunas cuevas, sabrosas
làmparas de seda en oscuras habitaciones, variaciones musicales y

temàticas: escobas, cacerolas abolladas, porcelanas rotas.
Diversos materiales que me encadenan al mundo, huyendo
de los abstractos y antològicos poetas de la època dictatorial
que dictaban el cànon y determinadas ortodoxias poemàticas

y caseras: escondidos detràs de sus poèticas y entelequias,
diplomaban la vida desde su cargo burocràtico en lejanos paìses:
con su sueldo les alcanzaba para vivir y morir dignamente, supongo,
quiero creer y sin embargo, amo a esos poetas, no sabrìa decir por què, o tal vez
sì.

jueves, 6 de febrero de 2025

Anti autoayuda

 Para ser cada dìa peor y terminar pronto

se recomiendan los siguientes trucos, o consejos o como se llame:

fumar como un escuerzo a màs no poder
arrojando humo a la cara de los parroquianos
los comensales,
los invitados a una fiesta famosa
fumando un cigarrillo negro atràs del otro
de modo de tener un olor y un aliento
francamente repugnante
de suerte que todos se alejen de uno: la familia
(nada queda en familia)
los amigos
las novias y amantes
todos y todas

otra sugerencia interesante: tomar y mezclar
toda clase de alcoholes: cerveza, vino blanco y tinto, sidra etc.
de manera de ofrecer la triste, tristìsima imagen
de un borrachìn empecinado
un ebrio empedernido y sin remedio alguno a la vista
al borde mismo del tremens delirium
es decir que ve toda clase de alucinaciones
auditivas, visuales, olfativas etc.
y delira a màs no poder
es decir que dice toda clase de estupideces
como una especie de ametralladora de idioteces
en vos bien alta, por otro lado
toda clase de improperios, exabruptos y palabras soeces
de esas referidas al cuerpo humano y a las sustancias que suelen salir de èl
(no entraremos en detalles)

acostarse con toda clase de prostitutas y prostitutos
de modo de contagiarse toda clase de enfermedades infecciosas y venèreas

tomar toda clase de drogas y estupefacientes etc.

pero en especial, entregarse al consumo de la droga màs poderosa y adictiva:
el
Sexo
que como una espada de Damocles
se cierne sobre nuestros corazones y cabezas
y nuestros sexos màs o menos erectos
haciendo la vida imposible de sobrellevar

estos son mis consejos de anti autoayuda
para hacerte la vida màs breve
en caso de que no gustes o no te animes al
suicidio

en este sentido y no en otro,
se recomiendo la atenta lectura del escritor rumano
Emile Cioran
o
de
Eugene Ionesco
tambièn rumano

Ùltima recomendaciòn o sugerencia
leer todos los libros de autoayuda que se pueda
gastarse todo el miserable salario en ello
luego de trabajar hasta 18 hs. al dìa
sin poder dormir
vìctima del màs atroz de los insomnios

Con esto ùltimo tiene el final màs que asegurado.

Si esto no da resultado
sugerimos el plan B:

concurrir a la Iglesia màs pròxima a su domicilio
todos los dìas, todo el dìa:
rezar durante horas
hacer la confesiòn
en varias iglesias de la localidad
hasta volverse totalmente loco de remate
loco furioso
o de lo contrario, mirar horas y horas durante muchos dìas
el aparato de televisiòn
hasta hacerse pedazos la vista
etc.

Discutir en el trabajo con su jefe
insultarlo o pegarle incluso un cachetazo
de modo de ser despedido sin indemnizaciòn alguna

Profundizar en el màs absoluto de los fracasos
hasta alcanzar la total perfecciòn

Etc.

domingo, 2 de febrero de 2025

taller de aforismos Caballito 2025

 La sangre con letra entra.

En aula cerrada no entran las moscas.
El alumno por la boca vive.
Galàn mata billetera.
Crìa alumnos y te comeràn los ojos.
Alumno que aprobò, volò.
A nota regalada no se le miran los dientes.
Mejor aprobado en mano que 10 volando.

El aula no se mancha.

taller de cuentos surrealistas 49034485

 Solìa pasarme que no podìa controlarme y me tiraba pedos, flatos (flat, flatus) en los lugares màs inverosìmiles o inadecuados: al hacer el amor, en el ascensor, en la playa, en reuniones sociales, dictando o dando càtedra de temas que desconocìa por otra parte en forma màs o menos absoluta o total y en otros sitios que el lector guste de imaginarse.

Es decir que al sonido se le sumaba el consecuente olor, mejor dicho, mal olor, o peor.
Lo peor del caso es que despuès de un tiempo no podìa controlar el maldito esfìnter y me hacìa encima ya sea orinando o defecando o las 2 cosas a la vez, juntas. Pero por suerte esto sucedìa en mi dulce hogar o llegaba a tiempo al toilette e inodoro (Pereyra) pero por ahì (o por ay!) no habìa higiènico papel pero gracias a Dios y a la tecnologìa digital y artificial inteligencia, me comunicaba por el celular con mis gomìas que me alcanzan el dicho papel: de pronto, afortunadamente, veìa arriba de la puerta una mano con el dichoso papel.
Si esto no ocurrìa apelaba a determinados libros que traìa por las dudas, preferentemente la obra completa de Orozco o autores parecidos o similares. (Sì ya sè que significan lo mismo pero me divierto hinchando las pelotas con pelotudeces, boludeces).
El maldito cafè, la leche me hacìan mal. Solo podìa tomar agua (sin gas).
Con el significante no se jode, como dice mi ex amigo Ricardo Strafacce.
Por el momento ando màs o menos bien si no no estarìa escribiendo esta chotada berreta y sobre todo, pedorra.
Pido disculpas a diestra y siniestra y me declaro totalmente culpable.

taller de narrativa surrealista 49034485

 Me metì un dedo en la colita y desde entonces no lo he podido sacar y de esto hace bastante tiempo y ahora vivo encorvado con el dedo en el culo, en el orto, en el esfìnter.

El problema es que en algùn momento tendrè que ir al baño y no puedo andar encorvado y con un dedo en el ano (ano, Ana) de alguna manera me lo tengo que sacar.
Esto me recuerda una historia inverosìmil que me contaba Tito Bardi en los viejos tiempos: perros que luego de fornicar, no podìan despegarse y humanos amantes que les sucedìa algo similar: la historia me parecìa bastante inverosìmil pero me gustaba còmo la contaba Tito: solìa pasarme que me contara pelìculas y despuès me gustaba màs el relato de Tito que la pelìcula en cuestiòn.
El tema es que con un poco de jabòn y otro poco de miedo saquè finalmente el dedo del recto. No fue tan dificil despuès de todo o nada.
No fue tan dificil, incluso fue fàcil, demasiado.
Al que no vi nunca màs fue a Tito: hace años, añares que no lo veo.
Ya debe haber muerto, seguramente.

escritura automatica surrealista 2025

 En un micro, bastante largo y grande por otro lado, de hecho de 2 pisos: se subìa por una escalerita de caracol y mirabas el paisaje urbano o suburbano (el profundo interior que era exterior) a travès del vidrio de la ventana del micro (que era como dije al comienzo, bastante grande y alto y largo). Y eso era todo o casi nada: eso fue todo lo que ocurriò o sucediò.

Nada que nadaba. En la piscina o pileta.
O como diablos se llame o diga o conozca y reconozca.
Nada que nadaba en una especie o suerte de gelatina cuadrada y transparente.
Con muy pequeñas olitas.
Y arriba un techo medio roto.
Yo me sumergìa en esa gelatina de cristal.
Generalmente, por las tardes.
Era ergo un micro algo macro. Magro.

taller de surrealismo prosa y poesia 49034485

 nos sentamos en la mesa de un bar a mirarnos y arrojarnos palabras: como en un sueño hablàbamos mientras fumàbamos y tomàbamos cafè o ciertos copetines cuyo sabor no recuerdo, dos mujeres me miraban sonrientes, y con cierta indeterminada sorna, creo, me miraban y de a ratos me besaban, me pedìan cosas, extrañamente luchaban entre ellas por mi culpa, creo, quiero creer, espero no equivocarme o sì: luchaban por conquistarme mediante miradas, sonrisas, juegos de manos, vomitaban sueños palabras poemas miradas sonrisas, arrojaban toda clase de cosas como dardos invisibles, como rayos televisivos o historietìsticos, còmicos comidos. A razòn de muchas palabras por segundo y como vengo diciendo miradas sonrisas orgasmos orquestas gusanos hermanos. En rigor de verdad, alucinaban, frecuentemente deliraban, craneaban sutiles venganzas y toda clase de represalias. Me echarìan del trabajo o jotraba, me hostigaban, me deliraban, me psico pateaban, me dormìan, me descansaban y desayunaban. Creo, quiero creer, espero no equivocarme pero ellas tiraban pasos y palabras, sueños e imàgenes de toda clase, imàgenes televisivas, foto y cinematogràficas, en hora buena, o mala. Y al final, sin la torta y sin el pan.

Como quien dice o desdice.

taller de prosa surrealista 49034485

 Un tenedor no tiene nada, es solo un instrumento, un utensilio, un cubierto, o algo por el estilo, digamos; un tenedor està protegido por ley de lo contrario no tendrìa nada, se lo sacarìan todo frecuentemente, con una frecuencia espeluznante, insòlita, quiero decir o desdecir: los chorros, vamos, chorros de chorros chorrean y chorean los rochos, ronchas, y esto no es todo, pero casi: no tengo nada y eso me hace màs o menos libèrrimo por no decir libertario, por no decir liberal o neoliberal; imàgenes: fotografìas desconsoladas de 2001: que se vayan todos etc. pero no se fue nadie o en todo caso, en cualquier caso volvieron, y eso fue cualquiera, cualquier cosa mariposa. Ojo al piojo. Bueno, como iba desdiciendo: un tenedor no tiene nada o muy poco: la onda es no tener nada, cuando menos tenès mejor: què catzo te van a robar, a bolsiquear, a rapiñar? Nada, ok?


Un tiempo un tenedor fue algo directamente diabòlico, digamos en la Edad Media, en el Medioevo que le dicen (por estar entremedio) con sus catedrales, vitrales y etc. Còmo te vas a meter eso en la boca, dicen que decìan los medievales, capturados por la Religiòn que no ligaba nada como hoy estamos atrapados en la aràcnida red massmediàtica.

De pronto me acuerdo que en medio de un monumento màs o menos monumental, nos besàbamos rabiosamente como amantes enloquecidos, como amantes electrocutados: nos miràbamos a los ojos. Luego hicimos el amor en la cama matrimonial y patrimonial de mis antiguos biològicos padres. Hicimos el amor, bien digo, o maldigo.
Destejimos el amor.
Deshilvanamos el amor, el hilo del amoroso relato o relaciòn.

Y decididamente no tenìamos absolutamente nada de nada, salvo, excepto a nosotros mismos ...

Y el relato o relaciòn se iba apagando lentamente ...

Nunca màs volvì a verte a pesar que te habìa regalado (o por eso mismo) un libro de relatos ...

talleres de baile y literatura Caballito 49034485

 en los grandes salones de fiestas y de bailes

de fines de siglo y de milenio, incluso
llenos de parejas de bailarines
y de espectadores que rodean la pista y observan con debida atenciòn
a las grandes parejas de bailarines
que se desplazan formando una ronda por el borde de la pista en cuestiòn
(en contra de las agujas del reloj se desplazan lentamente)
o simplemente bailan en el lugar
dependiendo esto ùltimo del baile de que se trate:

evidentemente no es lo mismo bailar tango
que salsa
vals vienès que se estila y acostumbra en los cumpleaños de 15 años
o en las bodas
que reggaeton
o los bailes de moda en la actualidad
el ùltimo grito o aullido

los espectadores, sentados, observan a los bailarines,
mientras fuman y sorben
toda clase de copetines y brebajes con alta densidad de alcohol

o parados en la barra
los tipos miran a las minas màs hermosas del mundo
y del barrio
o como mìnimo del baile en cuestiòn
el baile susodicho
(aunque no tenga la menor idea de què signifique esta expresiòn
pero suena rebien)

los grandes salones bailables llenos de humo y risas
y sonrisas y en
especial, miradas magnèticas
en medio de la niebla y una semipenumbra insidiosa

y còmo bailaban los grandes y famosos bailarines
famosos al menos en ese ambiente:
algunos
bailaban con 2 minas a la vez: toda una proeza
los hèroes del baile
pero las minas bailaban tambièn tan bien como èl
de otra forma eso no hubiera sido posible

el tema es que en los bailes de pareja
dependès de tu partener:
no podès bailar con cualquiera
o sì
pero el baile sale forzado
si no te llevàs bien
porque tu pareja puede bailar muy bien
pero si no congeniàs ...

yo tambièn desde la barra
con una copa en la mano
y un faso frecuentemente en la otra mano
solìa mirar a las grandes parejas de bailarines
de fines de siglo
incluso de milenio
y entonces
me daba no sè què salir a la palestra a bailar
a batallar
pero de todas formas era medio caradura
y salìa a bailar con las grandes bailarinas profesionales
y realmente era como hacer el amor
aunque verticalmente
seguramente ...

y por ahora
no tengo mucho màs para decir
para agregar

salvo, excepto que ahora me doy cuenta
que era el tipo màs feliz del mundo
en aquellos bailes de fines de siglo y milenio
y no lo sabìa entonces
no tenìa la menor idea
y ahora ha pasado mucho tiempo:
siempre es demasiado tarde ...

poesia romantica argentina 2025

 La melancolìa y el alcohol de las parejas de enamorados

en las tardes del invierno
cuando caen las grandes hojas
ellos se abrazan a los efectos de atemperar
esa furia
que los corroe por dentro

con el objeto de sencillamente morigerar
ese sucio o lìmpido dolor que los carcome
como un àcido invisible o una enfermedad
que no se deja ver
pero que asume insidiosamente
esa gloria de estar simplemente vivo
y hablar

esa mirada que mira a los enamorados desde adentro
y no les permite engañarse mutuamente
no les permite atenuar esa hermosa angustia: el Tango
(al decir de Juan Carlos Copes
recientemente fallecido)

ese gran y extremadamente elegante bailarìn
que con su pareja Marìa Nieves
llevaron al Gotàn por el mundo conocido
y desconocido

esa bella angustia que atraviesa a los amantes como elèctrica corriente:
el Tango
que como un sueño de dioses
nos hace menos infelices
o tan solo por un instante nos hace olvidar de esa
hija de re 1000 putas
la Muerte
que se cierne como una espada de Damocles
sobre nuestros sueños y cabezas
como si no alcanzara con trabajos
y salados salarios absolutamente miserables
que nos hacen la vida y la muerte imposibles
como si no alcanzara con los achaques y mortificaciones varias
de la vejez y la enfermedad
irremediables.

poesia amorosa argentina 2025

 los grandes o pequeños poemas que nos hablan del mar

el mar que amabas siempre en medio de habitaciones de paredes blancas y desnudas
a veces descascaradas
y grandes espejos enmohecidos que parecìan mirarnos
desde otros mundos

la tristeza nos unìa y el silencio
en medio de las grandes pizzerìas de fines de siglo
repletas de humo y comensales sinuosos
llenas de rumores y palabras y gritos y carcajadas

el silencio nos unìa
en medio de los grandes salones de baile llenos de parejas de bailarines
y de espectadores sentados en las grandes mesas que rodeaban la pista de baile
y de varias mozos y mozas que caminaban raudamente con sus grandes bandejas plateadas
en busca de un parroquiano famoso
munido de grandes dineros
que seguramente dejarìa arriba de la mesa
suculentas propinas

nos sonreìamos en medio de muchedumbres en las calles cèntricas
o en medio de los grandes barrios residenciales vacìos
rodeados de grandes y altos àrboles centenarios
que rumoreaban segùn el viento
lloviznas y murmullos
y extraños murmurios antiguos

nos besàbamos mediante interminables y antiguos òsculos
cuyo gusto es indescifrable
y tambièn bailàbamos en medio de la pista
en su centro exacto
en medio del torbellino de bailarines
que se desplazaban como grandes constelaciones o mirìadas
en contra de las agujas del reloj
como un huracàn de bailarines
un tornado de bailarines
vagamente milongueros
arduamente tangueros

y asì transcurriò nuestra juventud:
en medio de salas y pizzerìas llenas de humo y amplias carcajadas
entremedio de multitudes de parejas de bailarines
y en medio de pequeñas piezas de mùsica
y de habitaciones llenas de gemidos y murmullos y aullidos
y de toda clase de extraños sonidos y ruidos
que desafìan toda explicaciòn cientìfica
o de las otras.

poesia surrealista argentina 2025

 los grandes hoteles de pasajeros màs o menos sòrdidos

con una sordidez a toda prueba, a vuela pluma
en las noches de invierno o de verano
en las noches del otoño
mientras caen las grandes hojas
y la calle se llena de tesoros a la luz del dìa
blandos oros pisoteados indiferentemente
bellos sueños infantiles pisados con total indiferencia
por las adultas personas

nòmades siempre en los oscuros hoteles alojamientos
adonde se iban infructuosamente nuestras pobres monedas de estudiantes de bellas letras
y todo con el ùnico fin de alcanzar el dulce terremoto interior
el rayo que de pronto atraviesa todo tu cuerpo
en medio de la oscuridad màs profunda y nocturna

en medio de la noche màs oscura y profunda
el resplandor de tu cuerpo desnudo
cuyas ropas han caìdo de golpe
alrededor de tus pies principescos
o màs bien cenicientos

peinando ensueños, acabando en medio de la noche
eyaculando palabras en sueños
vomitando bellos poemas puramente verbales
defecando los màs hermosos poemas surrealistas
orinando oro lìquido
humedad terrestre
sexo mojado y bocas entornadas como puertas

sexo humedecido
y labios entreabiertos finamente
delicadas manos
y uñas que rozan la bolsa
la bolsa de
la bolsa o la vida

masajes en medio de la noche y de la sombra
masajes a 2 o 4 manos

trìos

fantasìas noctàmbulas
ensueños incestuosos o adulterinos

locuras sadianas
a libro abierto
o cerrado

poemas en medio del sueño
que al despertar no recuerdo
pero que vos me contàs

cursos de escritura surrealista 49034485

 mi experiencia o inexperiencia de amor solo consiste en algunos fuegos fatuos

en ciertas experiencias ìntimas, màs o menos frustradas
en determinados experimentos laboriosos, insustanciales
en las noches de otoño
mientras cae la nieve electrònica
mientras caen las hojas del otoño pandèmico y postnuclear, post
atòmico

mi experiencia amatoria no son sino muchachas fueguinamente desnudas
cuyos vestidos caen de pronto alrededor de sus pies
como niebla o tostado rocìo
como el àrbol que cae partido por el rayo
tambièn nosotros felizmente fulminados
por siempre
para siempre

mi experiencia amorosa no es otra cosa que alegres sustancias materiales o corporeas
viscosamente fluidas y chorreantes
cristalinas pero de un cristal lìquido
espejos derretidos por el tiempo
cuerpos desnudos que luchan entre sì en medio de la niebla
en medio de habitaciones llenas de humo blanco de cigarrillo
drogados de amor
dopados de besos
borrachos de angustia
y ebrios de excitaciòn

cuyos miembros se erigen como grandes obeliscos
en medio de la oscuridad màs profunda
sentìa tus labios en la sombra o en medio del sueño acabàbamos juntos
terminàbamos juntos a la par nuestro ansiado, nuestro añorado ensueño celoso

en medio de la oscuridad lòbrega de sòrdidos hoteles vacìos
sentìa tu aroma a mujer
sentìa el hueco que dejabas en la blanca sàbana
manchada de besos rojos
luego de bailar durante horas
los tangos màs dulces y feroces

tus ojos en el cuenco de la mano
y tus grietas y grutas eran la felicidad misma personificada

esto solo fue mi experiencia de amor: besarte cerrando los ojos
y comerte a besos
como si en eso se me fuera
la misma vida

taller de surrealismo particular 49034485

 cecilia se duplicaba o triplicaba en 3 mujeres similares como en un espejo desordenado:

durante las noches concurrìamos a los teatros cèntricos concèntricos con el objeto de
ver un espectàculo de tango bailado extrañamente con mùsica clásica, què se yo, era un
quilombo realmente eso, pero de ahì salìamos a cenar o tomar unos copetines y matarnos a

besos, a chupones limpios, sucios de besos y arena loquiana o nocturna màs bien, abrazos:
o nos despanzurràbamos sobre lechos helechos listos para comernos a besos, mordernos, mordazas;
encamarnos, vamos, acostarnos, ìntima, sabrosamente nocturnos o en medio de un cafè o barcito
nocherniego, sonàmbulo; y venìas del frìo neuquino o fueguino a bailar tangos milongas valses

con tu pelo corto, recortado como un caño; con tus grandes o suaves tetas, pezones, vulvas, ùteros rojos,
besos, tertulias: y nos sentàbamos en una mesa redonda como damas y caballeros, a charlar de perdidos
bueyes, a fumar, a cafetear, a sonreirnos y especialmente a chuponearnos, oralmente deshinibidos, delante

de todo el mundo: cuernearnos, adulterarnos como buenos adùlteros adultos, adolescentes màs bien en las
tardes del sàbado, o del domingo. sonrisas, ojos, miradas, màs copetines y brebajes misteriosos, espumantes,
sabrosos, y camas redondas y rodantes casas y toda clase de bailes y milongas y tangos y valses giratorios.

taller de poesia Caballito 2025 zona Parque Rivadavia

 Enfrente del abasto cuando no era shopping sino mercado de abasto, justo enfrente

miràbamos por una ventana cuadrada rectangular el dicho dichoso mercado
y còmo barruntaban la merca algunas pelìculas antiguas en blanco y negro
vistas en el aparato de televisiòn mientras devoràbamos unas suculentas empanadas

de carne, somos, nuestras mentes habìan sido adobadas desde ya muy pequeños
3 años digamos, por las lògicas televisivas y massmediàticas que impregnaban al
planeta entero homogeneizando todo como leche pasteurizada con perdòn de monsieur
Pasteur. Esto no es o no era todo: ademàs, me como unas uvas enteramente negras, una delicia.

Era con doña Stella Maris (estrella de amor o mar, psicoanalista o psicòloga) que hacìamos el amor
en las tardes de verano, los fines de semana, luego de bailar unos suculentos tangos adorables
y adobar esas melodìas con nuestros besos, con nuestros abrasos, con Gombrowicz y su

Ferdydurke, a quien de inmediato comenzè a malamente imitar como todo discìpulo que se
precie de serlo, y yo lo era (pretenciosamente). En pequeños manuscritos que vaya a saberse donde
diablos habràn ido a parar. Y de pronto, el techo caìa sobre nuestras cabezas, la mamposterìa, todo.

taller de poesia realista Caballito 49034485

 Una noche estaba tan borracho que

habiendome levantado una mina
la acompañè a su coche o automòvil o como se llame
en medio de la noche
en medio de la media noche y la media luna menstrua
y me sentè en la vereda y me puse a vomitar litros y hectolitros
de todo el alcohol que me habìa tomado en un dichoso cumpleaños unas horas antes
y cuya ùnica bebida era toda clase de alcoholes que tuve el mal tino de mezclar
en una melange siniestra que me hizo vomitar y vomitar
peor que el sonado caso
del famoso lazarillo de tormes
cuyo patròn o ciego trompa como se sabe le metiò los dedos hasta el fondo de la garganta
en bùsqueda de un objeto presuntamente hurtado por dicho lazarillo

y mientras vomitaba como un condenado vi còmo la dama en cuestiòn se subìa a su carro
y se alejaba en la noche

y una vez escribì un poema al respecto que mi difunto padre leyò y no le gustò nada
era un remedo bukowskyano presuntamente
y tampoco le gustò que arrojò toda una carpeta de poemas similares
al tacho de la basura
junto con libros de poemas de Mayakovski (editorial Losada)
y un broli de Anatole France (Premio Nobel)
y asì

la segunda vez que vomitè en exceso no me habìa alcoholizado
sino que simplemente discutì con una directora de escuela nocturna
vaga u ominosamente catòlica y cripto fascista
que forreaba y basureaba a algunos alumnos y docentes
de distintas maneras que no vienen al caso
o sì: entraba subrepticiamente en medio de una clase
so pretexto de observar
y criticaba arbitrariamente al docente delante de los alumnos
de mala manera:
baste esto como ejemplo, botòn y muestra

de manera, que me dio un pico de presiòn
y comenzè a vomitar en un tacho de basura
hasta llenarlo por completo
para sorpresa y disgusto de la tal directora
secretario y preceptores

en una ambulancia me llevaron a un hospital
no sin antes darme una pastilla
me recostè en una camilla
y al rato me sentì mejor
y me fui caminando por las calles solitarias y nocturnas
hacia mi hogar agridulce

la tercera vez que vomitè a màs no poder
fue en un MacDonalds
una tarde: me cayò pèsimo una tarta de verdura llena de aceite
que habìa cocinado mi padre en una sartèn:
de pronto sentì una nàuseas existenciales o sartreanas
y salì corriendo rumbo al baño
vomitando con tales estruendos y enchastrando todo el inodoro
de una forma que el seguridad se asomò por la puerta para contemplar aquel desastre
y al salir yo ni tuve la cortesìa de preguntarme còmo me sentìa o algo por el estilo:
seguramente no formaba eso parte de su trabajo
como privada seguridad

debo haber vomitado otras veces en mi vida
pero no las recuerdo demasiado
como las anteriores
habiendo alcohol de por medio o no
siempre borracho ebrio de vida poesìa noche y besos
de bellas señoritas endiablada o increiblemente
hermosas
al punto tal que me parecìa mentira que pudieran existir criaturas tan bellas
o tan llenas de luz o que eran
pura luz

realmente, valìa la pena haber nacido y vivido
para tan solo admirar tanta admirable belleza
aunque por momentos
densamente intolerable
felizmente fulmìnea

taller de poesia y ensayo literario Caballito 49034485

 Poema ensayìstico

El primer deber de un aspirante a escritor es

me parece
atrapar al lector con algo mìnimamente asombroso
de modo que se pregunte:
¿què corno es esto?
¿de què diablos se trata?
pero existen escritores tan ineptos o descorteses
o ambas cosas
que no lo logran desde el comienzo, ni
ahì, ni de casualidad.

Segundo deber: el lector o espectador-traidor debe preguntarse:
¿còmo sigue?
y por ùltimo: ¿còmo termina?
y querer que continùe
o que le haya gustado tanto que quiera releer el texto en cuestiòn
o quiera leer otro texto del mismo autor
o todo eso junto.

Por otro lado, los escritores podrìan clasificarse en 3 categorìas:
escritores que no defraudan jamàs: vg. William Somerset Maugham
Guy de Maupassant
Chèjov
entre otros

escritores que defraudan a veces: ejemplo: Horacio Quiroga, Cesar Aira (
sus ensayos son brillantes, en cambio, sus novelas son todas iguales:
leer una es ya haber leido todas, por lo
demàs, hace lo que le criticaba a Alejandra Pizarnik: se ha hecho de una
receta y la repite infinidad de veces: està capturado por la lògica
de eso mismo que cuestiona: el realismo; en
realidad, es una suerte de Bioy Casares con algunos toques presuntamente
surrealistas o
vanguardistas)

que defraudan siempre: todos los autores del gènero llamado autoayuda

escritores geniales: Borges, Arlt, Felisberto, Laiseca (pero por momentos se hace
demasiado el loco).

escritores argentinos actuales brillantes que quedaràn en el futuro: Leila
Guerriero.

jueves, 16 de enero de 2025

taller de poesia enero 2025 49034485

Taller de Poesia enero 2025 febrero lunes a domingos Clases particulares presenciales individuales en estudio privado Caballito Caba Capital Federal con Profesor y Licenciado en Letras UBA y tambièn Abogado 153.770.4979 & 4903.4485 Dr. Prof. Lic. UBA Gaston Matias. Caballito Caba zona Parque Rivadavia Turnos los 366 dias del año Precios muy accesibles y años de experiencia docente y pedagogica


taller de prosa surrealista Caballito 49034485

 Continuidad de los sueños: hay una fiesta de cumpleaños con el famoso artista que representa al padre , hay una màquina de 1000 tonos aproximadamente; hay ciertos indefinidos espacios onìricos que debemos atravesar: una iglesia o algo por el estilo de muy estrechos pasillos, la calle se inunda, hay un puente que hay que recorrer y lo recorro con el portero de la escuela que de paso me cuenta sus penurias y chismes; hay un aula y todo parece un sueño màs que una clase: hay ventanas y puertas y pupitres y pizarrones negros o verdes, pizarras blancas, y esbeltas mujeres que entran o salen. Tambièn hay grandes comilonas y comemos pero tambièn tengo mucho miedo de estar desnudo o mancharme enchastrarme con grandes excrementos: los baños no existen o no hay higiènico papel o todos los baños estàn ocupados y los dichos baños estàn llenos de hombres y mujeres que corren de acà para allà como si hubiera ocurrido algo grave o todo fuera màs o menos gris y somnoliento. Y asì son estas pesadas pesadillas ancestrales o cadavèricas. 

taller de escritura 2025 Caballito 49034485

 En efecto, una noche me encontrè un agujero en medio de la vereda y lo levantè y me lo guardè en el bolsillo para mostràrselo a mi novia y a mis amigos.

Cuando lleguè a mi casa lo saquè del bolsillo y comenzè a mirar a travès de èl.
Y lo que vi me volviò absolutamente loco.
Loco de remate y de atar.
Esto es lo que vi a travès del agujero maldito: vi mi futuro y estaba muerto para siempre, los ojos cerrados y me iba disolviendo lentamente en la nada ...
Horrorizado lo arrojè por la ventana.
Pero vi como un vecino lo recogiò y comenzò a mirar a travès de èl.
No sè lo que vio pero sì vi còmo comenzaba a correr desesperado hacia quien sabe donde ...
Bajè para ver donde habìa tirado ese agujero el vecino pero no lo encontrè por ningùn lado.
Pero no lo encontrè porque toda la vida, toda la realidad incluidos nosotros y nuestro cuerpo (o sea nosotros mismos porque no somos otra cosa que cuerpo) està llena de agujeros, de orificos, todo nuestro mundo es un universo perforado como un vasto queso gruyere y observamos lo "real" a travès de todos esos huecos del infierno ...
Oh Dios de dioses! Toda la realidad se aparecìa putrefacta y llena de muerte por màs que los humanos seres se hagan bien los pelotudos, quiero decir los desentendidos ...
Y no hay nada que hacerle: todo se dirige hacia la muerte por màs que se hagan el amor y tengan hijos y amigos y etc.
Todo se dirige a la muerte por màs que inventen nuevas tecnologìas y robots y nuevos aparatos y artificios supermodernos ...
Es màs todos estos aparatos automàticos tambièn producen muerte ...
Lo ùnico que sobrevive a travès de los milenios son las piràmides ...
Los grandes monumentos fascistas y totalitarios ...
Pero incluso a veces las grandes ciudades mueren, los lenguajes se extinguen fatalmente, los planetas, los satèlites, las enanas estrellas, los negros agujeros ...

taller de narrativa Caballito 2025 tel 49034485

 Habìa una vez un cuento que nadie querìa leer ni oir y era tan pero tan malo que estaba triste y compungido: nadie lo querìa y su autor era un anciano choto que se caìa a pedazos, una vez, que se cayò en un pozo ciego como una novia, nadie lo querìa rescatar y se tuvo que rescatar por sus propios medios que no eran muchos sino màs bien muy pocos.

Era malìsimo ese cuento, una verdadera porquerìa, una autèntica basura porque estaba llena de palabras malas y nenes malos y papàs muy malos y muy malas madrastras y muy feas.
Al principio, su madrastra se mostrò muy buena pero de a poco fue mostrando la hilacha, quiero decir, su verdadera naturaleza bestial; y es que era muy mala esta madrastra y trabajaba como maestra de escuela primaria y le escondìa la comida a nuestro hèroe.
De modo qu ecuando el protagonista de esta historia malìsima volvia a su casa de la escuela al mediodìa, no habìa nada para almorzar o estaba escondido en una habitaciòn cerrada con llave, cuya llave la tenìa precisamente la dicha maestra y madrastra que volvìa por la noche cansada de lidiar con otros niños igualmente malos.
Asì que el joven que volvìa de la escuela y no tenìa nada para comer, trepaba por el pulmòn del edificio, levantò la persiana de la dicha pieza cerrada y encontrò la comida como 40 años despuès encontrarìa una noche el expediente sumarial cuya causa le habìan armado como represalia por sus denuncias de maltrato laboral. Pero esta es otra historia y no nos adelantemos ni nos vayamos por las ramas, como quien dice.
Què feo era este cuento que podrìa haber empezado:
Habìa una vez un joven que sufrìa mucho porque su madre y su abuela habian muerto de pronto y quedò sometido a los maltratos de su perverso padre y de su igualmente odiosa madrastra.
Sufrìa mucho, sollozaba por las noches para afuera o hacia adentro: en su corazòn.
Hoy (2025) su padre ha muerto definitivamente y si bien ya no sufre por su culpa, extrañamente lo extraña porque a pesar de todo lo señalado renglones màs arriba lo queria mucho pues era su biològico padre. De su madrastra no se sabe nada aunque una vez pelotudeando la vio en Facebook. La encontrò. Pero no le mando ningùn mensaje.
Y este es el cuento màs malo existente.
O al menos uno de los peores.
Puro palabrerìo.

Taller de poesia sexual Caballito

 las luminarias de la noche, las sonrisas, los placeres diversos, los orgasmos

varios: el intento frustrado de maniatar a la dama a la cama, la dama amordazada
con amores perros, besos robados a la luz de la luna, màs amores perros

sexo en almìbar, sexo con variaciones, sexo saxo, saxo sexo: ojos que no ven, panzas
llenas, galàn que mata billetera, aventuras en el microcentro profundo, pelotas
que ruedan en el tiempo, monedas que giran, ceca o cara, cruz o cara, video clips

video juegos: en el shopping damos vueltas, divagamos, desvariamos y deliramos
a lo loco, locos lindos o feos, furiosos, y otra vez el cuerpo de la mujer desnuda
cuyas carnes estàn llenas de besos y mordiscos, eso que sale del cuerpo, eso que
emerge extrañamente, esos fluidos, esas raras sustancias viscosas, esas materias

esos maternos materiales, esas maternales matrices: labios pegados en medio de la
noche o de la tarde tòrrida, en medio de la mùsica, sumergidos en las melodìas: esos
deseos y esos placeres, esos gemidos, esa boca entreabierta, esos espasmos, esos ojos
vendados, esos ojos dormidos de la mujer desnuda y dormida, su boca abierta, su lengua.

Muerte de la modelo top

 Fantasìas vagamente sexuales en las tardes de verano, amores de verano o de

invierno: la visita a los lùgubres lòbregos albergues transitorios, a los hoteles
alojamiento o de pasajeros en la balnearia ciudad: la leche chocolatada y los
emparedados de jamòn y queso con algo de mayonesa, raras mañanas en mar

del plata: caminando por esas turìsticas calles y la visita al bar para observar
un aparato de televisiòn a colores mientras pasan un video clip y me tomo una
coca cola; fumar cigarrillos y arrojar al aire aros de humo blanco, grandes volutas:

juegos sexuales olvidados en la tarde tòrrida aguantable gracias al acondicionado aire;
juegos sexuales en camas de otros, en lechos desordenados, enredados a las blancas sàbanas
juegos sexuales con anteojos de sol relojes de sol o arena o agua largos guantes de terciopelo

o satin, dedos cerrados, bellos antifaces de carnaval veneciano y los grandes fetiches que
reemplazan al falo segùn Freud, polimorfos perversos, grandes zapatos de alto taco,
y los cuerpos haciendo el trencito en el baile, y saltando y moviendo las manos, haciendo
las grandes coregrafìas en el salòn de fiestas y el novio muerto su cabeza estrellada contra

el suelo brillante, la rubia modelo con sus grandes y altos tacos que resbala en la gran escalera de màrmol en medio de las fiestas de fin de año y se rompe la cabeza y muere.

taller de poesia amorosa Caballito 49034485

 El sexo se desenvolvìa en las tardes de verano, dentro de blancas habitaciones

de paredes caldeadas y sudorosas: en medio de varios espejos y roperos y
armarios: la cama deshecha, en el amor nos enredàbamos y desenredàbamos
mariposas en la panza y mimos, muchos mimos y caricias en el alma, en el

cuore: grandes espadas se arremolinaban sobre nuestras cabezas, y obeliscos
egipcios o porteños: nos sumergìamos en las sàbanas, en los manteles, como aquel
niño que dormìa con sus padres, se bañaba con sus padres que lo lavaban como a un
perrito o algo asì: el pelo rubio se fue volviendo negro y ahora canoso, color nieve.

De la primaria pasamos a los turbios hoteles pobres del barrio de Flores, de los piquitos
a los besos de lengua, innumerables fellatios y cunnilingus, en las tardes del verano:
los oscuros, los sòrdidos hoteles de mala o buena muerte, con gemidos, aullidos terrorìficos

y amorosos que desembocaban en ciertos mares lavatorios con jabones y detergentes
varios: despuès, el tè con leche o limòn en la confiterìa màs cercana o paqueta o la cena
en la pizzerìa cara y de muzzarella malìsima, una verdadera bazofia o porquerìa. En fin.

miércoles, 15 de enero de 2025

taller de poesia surrealista Caballito 49034485

 Si tan solo hubiera cambiado de pieza y de colchòn

me hubiera ahorrado meses y meses de dolor intenso
en la cintura: no podìa ni caminar, ni siquiera sentarme,
ni permanecer parado: y lo ùnico que tenìa que hacer era cambiar

de habitaciòn. Tardè meses en darme cuenta de ello. Para cuando me
dì cuenta, ya era demasiado tarde. Estaba perdido para siempre, muerto
en vida, como un zombie, un fantasma o algo siniestramente peor.
Digo siniestro en un sentido suavemente freudiano. En fin, como siempre, todo

habìa terminado para siempre: las nocturnas escuelas, los administrativos sumarios.
Debìa comenzar de nuevo, desde 0, si querìa llegar a algùn lado, a alguna parte.
De lo contrario, estaba condenado a incurrir en los mismos errores, tropezar

con las mismas piedras, como una suerte de Sìsifo redivivo, Camus mediante.
Pero si me hubiera avivado desde un comienzo, me hubiera evitado
unos cuantos problemas, unos cuantos inconvenientes, que no vienen al caso.

curso de surrealismo Caballito 49034485

 Vivìan de noche y morìan de noche: se suicidaban o eran suicidados por la sociedad

de los poetas vivos o muertos. Se exiliaban en lejanos paìses: cuando decìan lejanos el punto de
referencia siempre era Europa en un eurocentrismo francamente desbocado. Viajaban
hacia el exotismo o hacia el pasado, la Edad Media, preferentemente. En este sentido, no

diferìan mucho de los señores Romànticos. Ellos tambièn se suicidaban, tambièn ellos
soñaban con mundos nuevos, con doncellas dormidas como bellas durmientes, fèrreas
como vìas. Pero a diferencia de los antiguos romànticos, los antiguos soñadores, los
nuevos eran quizàs algo màs sofisticados: entre otras cosas, parecìan desear basarse

en el denominado Psicoanàlisis, un tal Andrè Breton. No contentos con esto. P3ro en fin.
No escribìan sonetos. Planificaban orgìas que obviamente se les iban de las manos, se
desmadraban. Orgasmos eso sì, como relàmpagos de deseo. Deseos siempre incandescentes.

La libertad, el amor y otras menudencias, otras yerbas. Esto no es todo. Es casi todo.
Pero no es todo. Creo. En fin. Recetas que no conducìan a ningùn lado, ninguna parte.
Compulsiòn a repetir lo mismo, màs de lo mismo. Desorden de los sentidos. Deseos.

Automatismo psìquico puro

 Los antiguos poetas surrealistas creyeron en ciertos determinados supuestos

tomados de Freud o Marx o Trotsky incluso o acaso Lenin y llevados al plano de
la escritura, el plano escriturario, como una especie de plano inclinado; sometidos
a los fantasmas màs atroces, se hicieron de largas filas de supuestos, de presuntos

precursores o ascendientes, por caso el Marquès de Sade, llamado el Divino.
Fueron aprehendidos como sagradas escrituras, escrituras sagradas, con una sacralidad
algo obscena, creyeron, acaso, en los màs violentos y sutiles y eficaces deseos, y se hicieron
tambièn de una cierta retòrica que les daba determinados resultados; abominaron del

periodismo pero se entregaron al coleccionismo de toda clase de objetos que marchaban
hacia los màs afamados marchands: de algo habìa que vivir, sentenciaba su jefe, el jefe de
la escuela o movimiento onìrico: alguien mordiò algo caìdo en el suelo e inmediatamente

muriò. Objetos reencontrados, azares diversos, azahares varios y dispersos, los antiguos
poetas se entregaron a los sueños con un fanatismo que hoy consideramos excesivo,
ciertamente, no obstante. Los antiguos poetas creìan en relatos màgicos, el amor, el deseo.

En el gym

 La antigua fuerza subsiste en mì, siento como sube por mi sangre

y llega a los viejos mùsculos fibrosos. De a poco voy recuperando algo
de la antigua energìa. Es odiosa la vejez, ni los viejos aman a los jovies.
Los ancianos se detestan entre sì. Las mujeres se miran con envidia

entre ellas. Siento còmo se agrandan los biceps y triceps. Còmo me lleno de
aire, de oxìgeno fresco. No hay nada como respirar, oxigenarse, es un placer
bàsicamente orgàsmico, orgiàstico. Cuando acabamos o eyaculamos, las narices
se llenan de aire. El hombre y la màquina se van consustanciando. El humano ser

y la màquina, por un instante son uno. De la misma forma, cuando hacemos cinta
ya sea caminando ràpido o trotando fuertemente. Obviamente, no vamos ni llegamos a
ninguna parte pero los pulmones se llenan de aire, de oxìgeno fresco de la mañana estival.

Preferentemente, a las 7 de la mañana es el horario ideal, a esa hora es cuando abre el gym.
Despuès, hace un calor insoportable, ya no se puede hacer gimnasia, te podès morir incluso,
acaso por el llamado golpe de calor. por un momento, vuelvo a ser joven, amo la frescura mañanera ...

En el gimnasio

 Los hermosos cuerpos jòvenes en el gimnasio a las 7 de la mañana

y entre la frescura matinal, yo, el viejo choto que ya se cae a pedazos:
como Mario, yo tambièn, a pesar de la ancianidad, concurro al gimnasio
y me desenvuelvo entre las inoxidables màquinas de acero.

Fue un error dejar de concurrir al gym y fumar estùpidamente durante 30 años
hacièndome pelota el cuerpo, la salud. He perdido la fuerza, me siento dèbil y cansado.
Inexplicablemente, pues no lo entiendo, perdì toda mi fuerza, estoy gordo y arrugado
y muchos parecen mirarme con làstima o con desprecio. Por el calor del verano, estoy

rojo como un tomate, màs la arterial presiòn, no se estila saludar, cada uno està en su
màquina. Empero, algo de la antigua energìa subsiste en mì, siento còmo avanza lentamente
y dìa a dìa aumento el peso y mis mùsculos van recuperando de a poco su antiguo vigor.

Fue un error haber abandonado la gimnasia, el atletismo. Fumar 30 años, una idiotez total.
De a poco, voy sudando como en los antiguos tiempos cuando yo tambièn fui joven y hermoso.
Aùn estoy vivo y por eso escribo y este poema da testimonio de ello, aun tengo algo de fuerza.

Icardi icardiado

 Icardi es icardiado en la actualidad mediante sutiles estratagemas y ciertos ardides

fraudulentos o jurisprudenciales que esgrimen los abogados duchos en su oficio:
reiteradas estafas pero acaso, pregunta: ¿acaso la vida misma no es una estafa
programada por Dios nuestro Señor? El màs grande estafador, el fraudulento por

antonomasia, por excelencia. Don Mauro Icardi se pasea por comerciales y civiles juzgados,
familiares fueros, penales fiscalìas, acompañado por su abogado, su representante, su
mandatario, y por su actual amante, la famosa y tristemente cèlebre China o La China.
Un minòn infernal, ciertamente. Pero tambièn la acusan de destruir familias enteras. Vaya

uno a saber. Solo sabemos lo que fabrican los periodistas de espectàculos, de chimentos, lo que
dicen figurarìa en el expediente, en cuestiòn. Pero todo es màs o menos construido por las
actuales tècnicas audiovisuales que son solapadas para el pùblico en general, exceptuando

a los señores estudiantes de Periodismo. Icardi es icardiado ergo por las actuales tècnicas y
formatos mediales, mediante sutiles y màgicos ingredientes ignorados por el pùblico en general
y todo es encubierto para dar la sensaciòn de magia: la magia de la televisiòn, puede decirse.

Icardi es icardiado

 Icardi fue icardiado afirma el tìtulo, esto se explica de la siguiente manera:

programas y programas dedicados a la estupidez màs absoluta que,
por otra parte, a nadie importa un bledo, un comino: naderìas, chismes con fecha
de vencimiento, todos los dìas y todo el dìa, el reinado de la estupidez, la chismografìa.

Icardi, Mauro, fue icardiado a su vez, acaso se lo merece: Wanda, como una sutil vampiresa
de ojos incandescentes y con sus grandes pechos puntiagudos, se pasea por los canales de
televisiòn, como pancha por su casa. Y todo empieza con ciertos supuestos desvirgamientos,
desfloraciones varias, la muchacha se hace la vìctima, la pelìcula, la fantasìa y todo termina

en orgasmos y matrimonios, adulterios varios, melodramas eficaces, turcas telenovelas en
las que el padre maltrata a sus hijas, las vende en matrimonio, como si fueran cosas, objetos:
no leyò a Kant evidentemente. Pero no nos vayamos por las ramas: Icardi fue icardiado, asì,

termina la novela o màs bien comienza: y parece no terminar nunca: visitas a los juzgados,
a fiscalìas, acompañado por su apoderado y por su señora amante actual: mansiones en
juego, programas de chimentos y de espectàculos, orgasmos, orgìas, cenas y carcajadas.

Amante fracasado

 Mujer atada a la cama como en una aguafuerte goyesca que nunca fue editada.

Tiran la casa por la ventana, literalmente. Fracasè miserablemente, me regodeaba
en el fracaso total, capturado por una cierta idea de èxito, de prestigio, de gloria
ruinosa. En la mañana vacìa caminaba por calles barriales hacia un cierto masaje.

Fracasè abruptamente debido a mi rancia estupidez, mi añeja sandez.
Profundizaba en la idiotez absoluta, me regodeaba en eso, me regocijaba, me
enroscaba en la frustraciòn, como si fuera masoquista o algo por el estilo.
Influido por la relectura de la obra arltiana y por la compulsiòn a repetir,

hacìa sìntomas, sistemas, boludeaba como un importante gilastrùn de lecherìa
alrededor de ciertas cuestiones de ìndole vagamente intelectual
que ni siquiera vienen al caso, veleidades vilmente intelectuales,

con la vileza de ciertos precios, ciertos seres. Fracasè de la manera màs miserable,
misèrrimo e ineficaz, absolutamente inepto, de una inepcia y de una obsolescencia
notablemente eficientes. Me durmieron, me acostaron, me descansaron, totalmente.

Maldita TV hitlerista, criptonazi

 En la noche màs atroz, fuiste vampirizada por un inexistente caballero

por un invisible amante que sigilosamente entrò a travès de balcones,
a travès de ciertos orificios en las descascaradas paredes, viejos video clubs
repletos de videos ya hace tiempo obsoletos. Amantes fuimos siniestramente

parasitados por subliminales mensajes publicitarios. Pàginas de eròticas fotos y
publicitarios avisos y eròticos videos y mensajes textuales. Televisivos programas,
computacionales programas, deseos manejados algorìtmicamente, mercados
deseantes, màquinas deseantes. Fuiste fagocitada, reconvertida en robot. Prostituciones

varias. Escorts. Masajistas. En paupèrrimas casas inundadas donde los vecinos perdìan
casi todo. Depresiones. Bajones varios. Resacas varias. Publicidades. Nuestro tiempo y vida
fueron comidos, carcomidos, roidos, corroìdos, desoìdos. Todo se perdiò miserablemente.

Perdimos nuestra vida y tiempo frente a la irrisoria, insìpida pantalla de televisiòn, en

blanco y negro y a colores. Nuestra vista fue hecha mierda por televisiva pantalla primero,
y por pantallas de computadoras y telèfonos celulares despuès. Y todo fue ilusorio.

Romance satànico

 Drogados por los màs oscuros y hùmedos deseos

por las fantasìas màs tortuosas y celestiales
por las pelìculas màs fervientes y altaneras
y por los novelones màs decimonònicos y ardientes:

las libèrrimas milongas fueron testigos de nuestros amores
y los alcahuetes màs verborràgicos nos entregaban a terceros discordantes
en los crepùsculos màs sangrientos y en las noches màs tòrridas
asì fueron nuestros amores llenos de abrazos y salivales besos lingüales

las pistas de baile dieron testimonio de los chismes màs sabrosos e inactuales
esas palestras danzantes fueron testigos de nuestros amores fugaces y eternos
y para siempre fuiste mìa y fui tuyo mediante la màs demonìaca de las posesiones
mediante de la màs satànica y demencial de las apropiaciones

mutuamente nos vampirizamos y succionamos noche a noche
noche a noche fue drenada toda nuestra sangre y espiritu
hasta que no quedò absolutamente nada de nosotros y nos volatilizamos en la nada.